Siempre que se piensa en hacer una fiesta lo primero que viene a la mente es recurrir a la playlist de alguna aplicación, incluso se puede llegar a pensar en CD´s y remotamente en un casete, dejando de lado aquellas agrupaciones que son la viva representación de lo tradicional. De la alegría propia de un conjunto a voces acompañado de melodías variadas interpretadas en instrumentos tan clásicos como un acordeón, la guitarra, maracas y castañuelas, evocando aires españoles.
Para el marco del festival salinero 2024, el encuentro de tunas se convirtió en el mayor atractivo para propios y extranjeros que sin pena alguna buscaban pareja para bailar y cantar a todo pulmón las canciones interpretadas por las agrupaciones en escena.
Inicios de las tunas
Las tunas iniciaron en España y gracias a los viajes esporádicos de sus intérpretes la tradición de un conjunto de músicos principalmente románticos con apodos identitarios y jocosos se fue reconociendo en diversas partes de Europa, como Portugal y Holanda, en América Latina en países como México, Guatemala, Colombia, Perú, Chile o Argentina. pero esta vez el color de los listones en las capas y la habilidad de los “bultos” -como se les conoce entre compañeros a aquellos que inician-, dio un gran espectáculo para la capital de la sal.
Zipaquirá con capa y Beca
En la foto integrante de la tuna Juglares de Zipaquirá en apertura de su presentación
El pasado 6 de octubre la plaza del minero fue epicentro del encuentro de tunas 2024. Agrupaciones representativas del municipio de Zipaquirá eran la fuente de diversión para todas las edades. Aquí solo importaba disfrutar, encontrar pareja para bailar y pasar un momento agradable con amigos y familia. En medio de la alegría que transmiten las voces al unísono entonando melodías, los trajes del tuno de capa y Beta – conjunto tradicional para vestir- adornan la fiesta.
Reconocimiento a la labor
En la imagen Tuna Confraternidad, participante del festival
Ser parte de una tuna no es solamente cantar al unísono con compañeros algunas canciones, es más que eso. Se trata de llevar un legado, una forma de vida, un sentimiento, pero sobre todo una tradición que hace que la ciudad o país que se representa quede en alto ante el mundo entero. Este es el caso de la Tuna Confraternidad que para la fecha cumple 40 años dando alegría a muchas generaciones. Grandes y jóvenes se ven identificados con sus interpretaciones. Además de lo que inspiran al ser escuchados, su larga trayectoria llevando en alto el nombre del municipio y de país los hace acreedores de diferentes reconocimientos a nivel nacional como el otorgado por la Asamblea departamental de Cundinamarca con la imposición de la Orden Policarpa Salavarrieta y a nivel internacional se les conoce como “La mejor tuna”, tras su participación en el Certamen Internacional de Tunas Barrio del Carmen, en la ciudad española de Murcia.
Director de la Tuna Confraternidad recibe reconocimiento de participación de mano de la subgerente de cultura del municipio
Más de una estuvo presente
En la imagen integrantes de Tuna Juglares tras recibir reconocimiento por asistencia al evento
Para dar más color a la fiesta diferentes tunas estuvieron presentes durante el evento. Entre las agrupaciones asistentes estuvieron La Tuna Andaluza de Chía, Tuna Romanza, Tuna Confraternidad, Tuna Juglares, Tuna Ciudad de Zipaquirá y Tuna D´Santacruz.
En la plaza del minero cientos de asistentes al evento estaban congregados para escuchar las agrupaciones y a sus intérpretes, recordando en algunos casos, tiempos que fueron mejores y en otros siendo el fan número uno de padres, hijos y esposos que en tarima lo daban todo por dejar el nombre de su tuna en alto ante la magnitud del evento y euforia de los asistentes, que sin importar los cambios mínimos de clima continuaban atentos a las presentaciones.
Plaza del minero en la Mina de sal durante el evento, asistentes reunidos
Sin pena a disfrutar y bailar
En la imagen asistentes al evento bailan al ritmo de flamenco interpretado por Tuna juglares
La edad es lo de menos, si en la sangre se siente la melodía que interpretan las tunas, solo importa pasar un buen momento y sacar “los pasos prohibidos” demostrando que las habilidades artísticas salen a flote en el mejor de los momentos y aquí era un buen momento para demostrar lo que se sabe, se siente y escucha. Canciones como piel canela, idilio, amapola, titiribí y pasodoble, la morena de mi copla hicieron parte del repertorio.
En la imagen integrantes de la Tuna Ciudad de Zipaquirá durante su presentación
El evento fue un gran éxito no solo para los organizadores del evento sino para asistentes e intérpretes que una vez más demostraron porque eran dignos de representar al municipio de Zipaquirá dentro y fuera del país para dar el mejor de los conciertos, ofrecer el mejor de los momentos y dejar en la memoria de muchos el mejor de los momentos.
Fotografía: Tomadas por Katherine Valencia Pedroza
Por: Katherine Valencia Pedroza
Comunicadora Social – Periodista