La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha ajustado al alza su previsión de crecimiento económico para Colombia en 2024, estimando un incremento del 1,8%, frente al 1,2% proyectado anteriormente. A pesar de este optimismo moderado, la previsión para 2025 se ha revisado a la baja, situándola en un 2,8% en lugar del 3,3% previamente estimado.
Este ajuste forma parte del último informe sobre las perspectivas económicas del país, presentado este martes por la OCDE. Según el documento, aunque el crecimiento sigue siendo modesto, hay señales de mejora en la economía nacional.
El consumo privado en Colombia se mantendrá en un nivel sólido, beneficiado por la disminución de la inflación, la flexibilización de la política monetaria del Banco de la República y el flujo constante de remesas. La OCDE destaca que, a pesar de una inversión moderada, la recuperación será gradual conforme se alivian las condiciones financieras.
Sin embargo, el informe también señala posibles dificultades. Se prevé un leve deterioro en el mercado laboral y un crecimiento moderado en las exportaciones, afectado por la baja demanda externa y la caída en los precios internacionales del petróleo.
Uno de los aspectos destacados es la expectativa de que la inflación continúe disminuyendo, acercándose al objetivo del 3% que se ha planteado para finales de 2025. El informe también menciona una mejora en el déficit de cuenta corriente, que se espera esté ligeramente por debajo del 3% del PIB, lo cual representa una mejoría en comparación con los niveles prepandemia.
Álvaro Santos Pereira, economista en jefe de la OCDE, subraya la importancia de revitalizar la inversión para mejorar la productividad y lograr un crecimiento sostenible a largo plazo. Sin embargo, los problemas actuales en la inversión privada, como la incertidumbre derivada de reformas y el aumento de los costos de materiales, aún representan desafíos significativos.
A pesar de estos desafíos, la inversión extranjera directa alcanzó un récord de 17.000 millones de dólares en 2023, reflejando la confianza de los inversionistas en el país. No obstante, persisten riesgos asociados a las tensiones geopolíticas globales y la vulnerabilidad ante fluctuaciones en los mercados externos, exacerbados por una elevada deuda externa que representa el 60% del PIB.
El informe también resalta avances en la consolidación fiscal, que han reducido la deuda pública al 57% del PIB en 2023. No obstante, la OCDE advierte que los costos de financiamiento han aumentado desde la pérdida del grado de inversión en 2021, y enfatiza la necesidad de mantener una prudencia fiscal para evitar mayores aumentos en estos costos y asegurar la sostenibilidad de la deuda.
Finalmente, la OCDE critica la fragmentación del sistema tributario en Colombia y aboga por una reforma integral que reequilibre la carga tributaria y simplifique el sistema. Esta reforma debería no solo aumentar los ingresos tributarios, sino también estimular la inversión y mejorar la progresividad del sistema.
Por: Juan David Sánchez, Periodista
Fuente: OCDE