La reforma pensional aprobada en 2024 por el Congreso de la República y sancionada por el presidente Gustavo Petro ha traído cambios significativos para las mujeres colombianas, especialmente aquellas que son madres. Esta reforma introduce una medida que busca reconocer el trabajo no remunerado que las mujeres desempeñan en el hogar, particularmente en el cuidado de los hijos.
Uno de los puntos clave de la reforma es la reducción de semanas de cotización necesarias para que las mujeres puedan acceder a la pensión de vejez. Según la Ley 2183 de 2024, esta reducción aplica únicamente a mujeres que hayan tenido hijos biológicos, reconociendo así el esfuerzo y dedicación invertidos en la crianza de los mismos. Este beneficio es exclusivo para mujeres que hayan cotizado en el sistema pensional y que, por las exigencias del mercado laboral y las responsabilidades del hogar, no han logrado completar el número de semanas requeridas.
¿Cómo funciona la reducción de semanas?
El número de semanas que se reduce por cada hijo es un punto crucial en esta reforma. Se ha estipulado que, por cada hijo nacido, las mujeres podrán descontar 50 semanas del total de semanas que debían cotizar para acceder a la pensión. Esto significa que una mujer que haya tenido tres hijos podrá reducir hasta 150 semanas de su historial de cotización.
Para las mujeres, la edad de jubilación en Colombia es de 57 años y se requiere un mínimo de 1,300 semanas cotizadas para acceder a la pensión de vejez. Con la reforma, este requisito puede reducirse significativamente dependiendo del número de hijos, lo cual representa un avance en materia de equidad de género dentro del sistema pensional.
Un reconocimiento al trabajo del hogar
La medida implementada en la reforma pensional es una forma de visibilizar y reconocer el trabajo no remunerado que las mujeres realizan dentro del hogar, especialmente en el cuidado de los hijos. Durante años, este esfuerzo ha sido invisibilizado por la sociedad y los sistemas de protección social, lo que ha dificultado a muchas mujeres alcanzar la pensión tras años de dedicación a la familia.
Esta reforma también responde a la realidad del mercado laboral colombiano, donde las mujeres enfrentan mayores desafíos para ingresar y mantenerse activas laboralmente debido a la falta de políticas de conciliación entre la vida familiar y profesional. Con este cambio, el Gobierno busca aliviar la carga económica de las madres y garantizarles una vejez digna.
Alcances y limitaciones
Es importante destacar que este beneficio no aplica a hijos de crianza ni a otras formas de cuidado no parental. A pesar de las peticiones de diversos sectores para que este descuento se extienda a otras formas de maternidad, como la adopción y el cuidado de hijos de crianza, la ley ha limitado el beneficio exclusivamente a mujeres con hijos biológicos.
Además, la medida ha sido bien recibida por organizaciones feministas y de derechos laborales, que consideran que esta reforma es un paso hacia la equidad en un país donde la brecha de género en el acceso a la pensión es significativa. Sin embargo, también se han planteado críticas por la exclusión de madres adoptivas o mujeres que han criado hijos bajo otras modalidades.
Proyección y futuro de la reforma
La Ley 2183 de 2024 comenzará a aplicarse desde julio de 2025, y se espera que las administradoras de pensiones comiencen a ajustar sus procesos para implementar estos cambios de manera efectiva. Con esta modificación, el Gobierno busca no solo mejorar las condiciones para las mujeres en el sistema pensional, sino también avanzar hacia una mayor justicia social en un país donde el trabajo del hogar ha sido tradicionalmente menospreciado.
La reforma pensional del 2024 marca un hito en la historia laboral de las mujeres en Colombia, ofreciendo una oportunidad de jubilación más accesible y justa, reconociendo su rol como madres y cuidadoras en la sociedad.
